La actriz Kelley Mack, reconocida por su participación en The Walking Dead, murió el 2 de agosto en Cincinnati a los 33 años, tras una batalla contra un agresivo cáncer. Su familia confirmó la noticia.
Kelley Mack, recordada por su papel en la exitosa serie The Walking Dead, falleció en su ciudad natal de Cincinnati el pasado 2 de agosto. La actriz tenía 33 años y pasó sus últimos momentos rodeada de su madre y su tía, según informó su hermana en redes sociales.
“Con una tristeza indeleble, anunciamos el fallecimiento de nuestra querida Kelley. Una luz brillante y ferviente ha partido hacia el más allá”, expresó su hermana, quien detalló que Mack murió en paz acompañada de sus seres queridos.
Además de su papel en The Walking Dead, Mack apareció en reconocidas producciones como 9-1-1 y Chicago Med. También se desarrolló como guionista junto a su madre, Kristen Klebenow, con quien trabajó en proyectos como On The Black, inspirado en la historia de sus abuelos.
Un servicio en honor a la actriz se llevará a cabo el 16 de agosto en el Glendale Lyceum de Ohio. Posteriormente, se celebrarán eventos conmemorativos en Los Ángeles para honrar su vida y legado.
En enero de este año, Mack compartió que había sido diagnosticada con un glioma difuso de línea media, un tipo de cáncer poco común y agresivo. La enfermedad afectó su movilidad, obligándola a desplazarse con ayuda de un andador y una silla de ruedas.