Navidad es una gran temporada en el año, pero solemos gastar mucho más. Te compartimos estos tips para tomar mejores decisiones con tu dinero.

Si bien la temporada navideña es una de las favoritas para los mexicanos, también puede ser un dolor de cabeza al generar una presión financiera adicional, sin embargo, no es necesario acumular más deudas en las tarjetas de crédito, recurrir a préstamos o retirar dinero de los fondos de ahorro para tener una feliz Navidad.

En la elaboración del presupuesto la planificación lo es todo y para realizarlo es fundamental respetarlo y aprender a priorizar los gastos fijos del mes (pagos de servicios, deudas y ahorro), posteriormente, calcular cuánto dinero de su salario se puede destinar a los ‘gastos extra’ de la temporada, como lo son las comidas, cenas, regalos y viajes planificados.

Para esto, es importante adaptar a tu bolsillo a un presupuesto personalizado que tenga en cuenta sus ingresos y gastos. Iniciar una lista puede ser una herramienta de ayuda para conocer la cantidad de dinero que se puede gastar y tener claro qué se necesita y así evitar gastos innecesarios.

Además de establecer límites monetarios para cada categoría (ropa, cenas, viajes) y también en específico fijar una cantidad monetaria para cada regalo o detalle y posteriormente sumarla y verificar que no exceda el presupuesto general.

Evitar los ‘gastos hormiga’ como los taxis para trasladarse al trabajo o bien, para dirigirte a otros lugares, así como la compra de cafés o tés fuera de casa y comida rápida, ya que el conjunto de esto puede sumar una cantidad importante a final de cada mes sin darse cuenta. En cambio, este dinero lo podrá invertir en más regalos o experiencias navideñas.

México es el segundo país a nivel América Latina que gasta más durante la navidad con un presupuesto promedio de 368 dólares o el equivalente a 7,360 pesos incluyendo regalos, comida y ropa, de acuerdo con una encuesta realizada por Picodi y Statista.

Por esto es importante conocer tus límites financieros y sobre todo respetarlos para evitar deudas innecesarias que te hagan tener un recuerdo amargo en los próximos meses de la Navidad.