No solo es beber agua: aprende cuánto, qué y cuándo hidratarte para mantener tu energía y evitar riesgos al ejercitarte en calor extremo.
Intro: No solo es beber agua: aprende cuánto, qué y cuándo hidratarte para mantener tu energía y evitar riesgos al ejercitarte en calor extremo.
El ejercicio bajo altas temperaturas aumenta la sudoración y la pérdida de líquidos y electrolitos, lo que puede provocar fatiga, calambres y hasta golpes de calor si no se repone lo perdido a tiempo. La hidratación inteligente no solo mejora el rendimiento físico, también protege la salud y acelera la recuperación.
El agua es suficiente para entrenamientos cortos. Pero si el ejercicio es prolongado, intenso o en condiciones de mucho calor, las bebidas deportivas con electrolitos (sodio, potasio, magnesio) ayudan a reponer las sales minerales perdidas por el sudor y mantienen el equilibrio hídrico.
Evita bebidas con exceso de azúcar y las energéticas con cafeína, que pueden aumentar el riesgo de deshidratación y problemas cardíacos.
La hidratación inteligente es personalizada: escucha a tu cuerpo, anticipa tus necesidades y ajusta tu consumo de líquidos según el calor, la actividad y tu propio ritmo. Así, tu rendimiento y tu salud estarán protegidos, gota a gota.