No se trata solo de letras que conforman un acrónimo, sino de personas reales con experiencias únicas, historias propias y luchas personales tan distintas como respetables.

Cuando las empresas utilizan la diversidad LGBTIQ+ como una mera estrategia de marketing, trivializan y reducen la importancia de los desafíos y luchas que enfrenta esta comunidad. Es cierto que cada vez más personas y compañías muestran su apoyo a través de campañas y productos dirigidos a la comunidad LGBTIQ+, pero esto no debe ser solo una cuestión de imagen o ganancias.

Valores > Campañas

La inclusión y el respeto deben ser valores genuinos que impregnen la cultura de las empresas, y no una simple táctica publicitaria. Las compañías que se comprometen auténticamente con la diversidad LGBTIQ+ no solo se benefician de una imagen positiva, sino que también contribuyen a un cambio social significativo. Por ello, es fundamental que no solo se limiten a la visibilidad de la diversidad LGBTIQ+ en sus campañas, sino que también trabajen en la inclusión real y en la creación de entornos seguros y respetuosos. Esto implica políticas internas de no discriminación, apoyo a empleados y empleadas LGBTIQ+, y oportunidades de crecimiento y liderazgo igualitarias.

Calvin Klein

La icónica marca, reconocida por sus campañas arriesgadas y provocadoras, que siempre evocan una sexualidad fluida y la aceptación de la sexualidad e identidad de género, fue tachada de hacer queerbaiting en esta ocasión, cuando [Miquela](https://www.instagram.com/lilmiquela) (una influencer virtual creada por Trevor McFedries y Sara DeCou) y Bella Hadid se besaron en [un video](https://www.youtube.com/watch?v=JuTowFf6B9I) para la campaña #MYCALVINS #MYTRUTH.

Fundación Humana

Hasta las ONGs pueden tener un tropiezo (o una caída infame en este caso), y es que [Fundación Humana](https://www.humana-spain.org/) de España, trató de hacer un chiste inteligente, un juego de palabras sofisticado entre la idea de salir del clóset y el reciclar ropa para donarla con su [

“Del armario al contenedor”](https://www.20minutos.es/gonzoo/noticia/del-armario-al-contenedor-polemica-campana-lgtbi-desafortunada-rectificacion-3687100/0/), aunque lo único que lograron fue el terminar con una campaña completamente malograda y que incluso sonaba homófoba.

No es una herramienta, es un movimiento

La diversidad LGBTIQ+ no puede ni debe ser utilizada como una herramienta para el mero beneficio comercial. Las empresas tienen una responsabilidad social de promover el respeto, la igualdad y la inclusión en todas sus prácticas, más allá de una campaña de marketing.

La diversidad LGBTIQ+ es mucho más que una estrategia de marketing. Representa una realidad humana compleja y diversa, con historias y experiencias únicas. Las empresas que genuinamente apoyan y promueven la diversidad contribuyen a un cambio real y positivo en nuestra sociedad.