Norte: La tierra de las carnes asadas patriotas

Si tu celebración del Grito incluye una parrillada monumental con carne asada, frijoles charros y tortillas de harina, es muy probable que tus raíces estén en el norte del país. Los norteños aprovechan cualquier ocasión para sacar la parrilla, y el 15 de septiembre no es la excepción. El grito aquí va acompañado del chisporroteo de la carne sobre las brasas.

Centro: Donde el pozole reina supremo

Para los habitantes del centro del país, especialmente en estados como Guerrero y la Ciudad de México, no hay 15 de septiembre sin un buen tazón de pozole. Si tu celebración no está completa sin este platillo, acompañado de tostadas y chile en polvo, tus raíces probablemente estén en el corazón de México.

Bajío: La tierra del tequila y el mariachi

Si tu forma de celebrar incluye echar porras con un caballito de tequila en la mano mientras escuchas mariachi en vivo, es muy probable que pertenezcas a la región del Bajío, especialmente a Jalisco. Aquí, el grito va acompañado de "¡Viva México!" y "¡Arriba Jalisco!"

Sur: Donde el mole es protagonista

En estados como Oaxaca y Puebla, la celebración no estaría completa sin un buen mole. Si tu mesa del 15 de septiembre siempre tiene un guiso de mole negro, coloradito o poblano, dependiendo de la región específica, tus raíces sureñas se están manifestando.

Península de Yucatán: Sabor a cochinita

Para los yucatecos, quintanarroenses y campechanos, la cochinita pibil es imprescindible en la celebración. Si tu forma de gritar "¡Viva México!" incluye tacos de cochinita con cebolla morada, entonces la Península de Yucatán corre por tus venas.

Costa: Mariscos a la mexicana

Si tu celebración incluye un cóctel de camarones con los colores de la bandera o un pescado a la talla con sabores patrios, es muy probable que tus raíces estén en alguna de las costas mexicanas, ya sea el Pacífico o el Golfo.

La Ciudad de México: El corazón de la fiesta nacional

Si para ti celebrar el Grito significa ir al Zócalo capitalino, aguantar la lluvia casi segura, y esperar horas para ver al Presidente salir al balcón, entonces eres chilango de corazón, sin importar dónde hayas nacido.

Recuerda que estas son generalizaciones divertidas y que en realidad, las tradiciones se mezclan y adaptan en todo el país. Lo importante es que, sin importar cómo lo celebres, el espíritu de unidad y orgullo nacional es lo que une a todos los mexicanos en esta fecha tan especial.

¡Viva México!