Los descuentos de regreso a clases son tentadores, pero no todos valen la pena. Aprende a identificar las verdaderas ofertas y evita que tu cartera se quede vacía.
En temporada de regreso a clases abundan las promociones, pero no todas significan un verdadero ahorro. Una regla básica: compara precios antes de comprar. Muchas tiendas inflan los precios días previos para que el “descuento” parezca mayor. Usa comparadores en línea o revisa el historial de precios de los productos que necesitas.
Antes de dejarte llevar por los anuncios, identifica lo que realmente necesitas: útiles, libros, transporte o gadgets. Haz una lista priorizada y cíñete a ella. Así evitas compras impulsivas que pueden vaciar tu presupuesto.
Las compras colectivas son un recurso poderoso para estudiantes. Coordínate con amigos o compañeros para adquirir al mayoreo útiles o material escolar. Esto reduce el costo individual y, en ocasiones, te permite acceder a beneficios extra como envíos gratis o regalos promocionales.
El pago a plazos puede ser un aliado, pero solo si se usa con disciplina. Evita comprometerte con productos que no son indispensables y asegúrate de que tu presupuesto mensual puede cubrir el pago. Un truco: nunca destines más del 20% de tus ingresos mensuales a pagos diferidos.
Con Hey Banco puedes controlar tus compras en tiempo real desde la app, recibir alertas de tus gastos y separar un apartado específico para el regreso a clases. Así sabrás cuánto puedes destinar sin poner en riesgo tu fondo de emergencia.
Recuerda que no necesitas estrenar todo en agosto. Algunas compras pueden esperar a mitad del semestre, cuando los precios bajan. El mejor truco para aprovechar las ofertas es la paciencia: organiza tus prioridades y compra solo lo necesario.