Carlos Treviño forma parte de la comunidad LGBTQ+ y del COLECTIVO MÖRK, grupo compuesto por artistas que buscan expresar sus sentimientos y emociones a través del arte drag.

Drag es un acrónimo de “Dressed as girl”, que se usa para nombrar a las personas que usan plataformas, pelucas y accesorios para crear e interpretar un personaje andrógino (rasgos externos que no coinciden con su propio género). Una de las características del maquillaje drag es ser exagerado, resaltando cada rasgo facial del personaje.

Actualmente una de las drag queens más reconocidas es [RuPaul](https://www.instagram.com/rupaulofficial/?hl=es), quien además es modelo, actor, cantante, compositor y presentador estadounidense. Su programa de televisión “RuPaul's Drag Race” fue lanzado en el 2009 y es uno de los más representativos para la comunidad drag queen. RuPaul ha sido uno de los personajes más influyentes para la industria de la moda y maquillaje respecto al drag queen.

Para conocer sobre la cultura drag queen en México, entrevistamos a Carlos Treviño, un regiomontano que forma parte de la comunidad LGBTQ+ y del [COLECTIVO MÖRK](https://www.instagram.com/intothemork/?hl=es). Dicho grupo está compuesto por artistas que buscan expresar sus sentimientos, emociones y expresiones a través del arte como también mostrar su trabajo al mundo entero.

Su nombre drag es La Pipiripau y se identifica como un hombre cisgénero que le gusta hacer de drag queen. La Pipiripau cuenta que cuando estaba en secundaria tenía muchos prejuicios hacia las personas que hacían travestismo, transformismo y se maquillaran o actuaran diferente a lo que estaba estipulado para los hombres y mujeres.

Un día La Pipiripau vio fragmentos del programa estadounidense “RuPaul’s Drag Race”, el cual trata sobre drag queens que compiten a través de diferentes retos para ganar la corona y ser la Reina del Drag Race, fue ahí cuando empezó a descubrir que el drag va más allá de sólo vestirse como mujer, que tiene un *statement*, un mensaje político y que busca transgredir.

“¿Qué pasa si yo me maquillo?, ¿Quién sería yo?, ¿Qué personaje haría?” fueron las preguntas que se hizo La Pipiripau antes de su primer performance. De acuerdo con La Pipiripau, para hacer drag debes de tener un personaje, no sólo es vestirse de mujer o maquillarte, es hacer una declaración.

“El drag es un performance porque es un arte, es un performance que empieza desde un personaje donde cambias tu forma de actuar, donde interpretas o encarnas a alguien más, donde dejas de ser tu persona por un momento” explica.

La Pipiripau menciona que a través de sus compañeres, amigues y hermanes ha podido poco a poco adentrarse al maquillaje de drag queen. Al principio fue difícil para La Pipiripau entrar al mundo del maquillaje, pero fue experimentando y conociendo esta parte diferente del drag queen hasta lograr llegar a su personaje actual.

“El maquillaje no lo es todo para una drag queen, forma parte de, pero no lo es todo”, aclara.

Para La Pipiripau al maquillarte estás cambiando lo que eres, estás siendo una nueva persona, estás interpretando a alguien y te estás cambiando completamente. Carlos nunca va a ser lo mismo que La Pipiripau, pues explica que son diferentes desde el hecho de que tiene maquillaje y diferente vestimenta, explica.

Las drag queens, asegura La Pipiripau, usan diferentes técnicas de maquillaje y recursos estéticos para dar un mensaje, usan materiales fuera de lo común, incluso arriesgan su salud e integridad, ya que están muy comprometidos con su statement.

Respecto al maquillaje, La Pipiripau menciona que al principio todos las drag queens empiezan por admiración a alguien o porque vieron a un personaje hacerlo, siempre se basan al principio en un rostro y referencia de lo que es el maquillaje, pero al final todos terminan explorando su estilo para darle vida a la drag queen que quieren ser. Al principio La Pipiripau se tardaba entre 2 a 3 horas en maquillarse, pero no era el resultado que quería, confiesa. Actualmente, tarda el mismo tiempo, sin embargo cuenta que ha mejorado su práctica y se ha conocido más su rostro.

Una artista en el maquillaje que inspiró a La Pipiripau fue Anaxagora, una persona no binaria que le enseñó muchas técnicas y formas más rápidas para poderse maquillar. Otra fuente de inspiración en el maquillaje para La Pipiripau es Rebel Mörk, ganadora de La Más Draga 4.

Finalmente, el poder ser alguien más es lo que le gustó a Carlos cuando empezó a ser La Pipiripau, agradece que su personaje rompió todos sus miedos y le dio más confianza en sí mismo. A través del maquillaje, La Pipiripau siente que expresa sus emociones y quién es, que rompe estereotipos y etiquetas como también roles de género establecidos por la sociedad.